El proceso hasta finalizar una instalación de placas solares requiere de un tiempo preciso. Hay que desarrollar una importante logística para que todo funcione a la perfección, pero también hay que presentar todo el papeleo correspondiente a la tramitación administrativa que se exige para una instalación de autoconsumo.
Este proceso burocrático requiere de unos pasos determinados que siempre hay que tener en cuenta por la duración de los mismos. Desde Enaltia Solar te adelantamos que no debes preocuparte por este punto, ya que corre de nuestra cuenta tras la firma del acuerdo, pero es importante conocerlo para saber el proceso hasta el resultado final. Os vamos a contar algunas claves importantes durante la tramitación de una instalación de autoconsumo.
Primer paso: estudio previo
Justo después de firmar el proceso de instalación con los clientes, y antes de iniciar los trámites administrativos, nuestro equipo realiza un estudio previo en el emplazamiento. Para ello, consultamos tres posibles restricciones para asegurarnos de que no habrá problemas más adelante:
- Urbanísticas. Es decir, que la instalación no atente contra la protección del patrimonio.
- Medioambientales. Que no afecte a las normativas referentes a la Red Natura o ZEPA, entre otras.
- Infraestructuras. Para no invadir zonas aeroportuarias, portuarias, militares, etc.
Tramitación antes de realizar la instalación de autoconsumo
Una vez realizada la revisión por nuestra parte en el lugar elegido para la instalación, se inician las gestiones administrativas para obtener los permisos y así iniciar la obra. En este punto del proceso, debemos pasar por tres agentes distintos que expedirán las autorizaciones correspondientes:
- Administración local. En este caso, será el ayuntamiento de la localidad donde se vaya a instalar el equipo fotovoltaico, que deberá dar la correspondiente licencia de obra.
- Admon. autonómica. Normalmente, suele ser la consejería de Industria del gobierno regional. En su caso deben conceder la autorización para garantizar la protección medioambiental y que la instalación sea de utilidad pública.
- Distribuidora eléctrica de la zona. Esta tiene la obligación de ofrecer el aval de la instalación de autoconsumo y conceder los permisos de acceso y conexión mediante la firma de un contrato.
Después de pasar por estos tres niveles, llega por fin el momento de recibir la autorización administrativa, por parte del gobierno autonómico también, para realizar la instalación. La ley obliga a que esta cumpla con el reglamento técnico aplicable en función de la potencia y conexión que se va a emplear.
El procedimiento a seguir después de la instalación
Una vez tengamos el flamante sistema de energía fotovoltaica, llega la hora de iniciar los trámites finales. Lo primero de todo es obtener el certificado de fin de obra y la autorización de explotación desde la consejería de Industria.
El siguiente escalón burocrático que hay que subir es, de nuevo, con la distribuidora energética. Este punto es un poco más largo y necesita solucionarse con varias acciones:
- Contratos de suministro y de servicios auxiliares.
- Verificación por parte de la compañía.
- Comunicaciones referentes al acuerdo de reparto energético y a la compensación de excedentes.
Ya falta poco. Solo quedan tres últimos pasos de tramitación que finalizarán con el inicio de la explotación de autoconsumo:
- Licencia de la admon. local para el inicio de la actividad.
- Inscripciones en los registros del gobierno estatal: autoconsumo de energía eléctrica, por un lado, y Registro Administrativo de Instalaciones Productoras de Energía Eléctrica (RAIPRE).
- Contrato de representación por parte de la distribuidora.
Para ampliar detalles sobre estos trámites administrativos, os recomendamos leer la guía realizada por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE).
Aunque el proceso sea largo, las ventajas posteriores en ahorro de energía merecerán la pena. Además, como ya te hemos comentado, no tendrás que preocuparte por nada. Nosotros nos encargaremos de todo el procedimiento administrativo de manera profesional. Además, cuando haya que realizar modificaciones, la tramitación será mucho más sencilla. Así lo estableció el reciente real decreto en materia de energía.
