04 enero - 2021

No hay mejor forma de demostrar el ahorro que puede conseguirse en la factura eléctrica con una instalación fotovoltaica que hacerlo con datos reales. Para muestra, analizamos el caso de éxito de autoconsumo industrial de uno de nuestros clientes: Mariscos González.

La instalación fotovoltaica para autoconsumo ha permitido a esta empresa aprovechar un espacio hasta ahora desaprovechado. Y convertirlo en ahorro energético. Pasemos al detalle de la instalación y dejemos que hablen los números.

Detallando la instalación de autoconsumo industrial de la empresa Mariscos González

Mariscos González es una empresa dedicada a la comercialización de pescados y mariscos, que también cuenta con cocederos propios. De partida, podemos presuponer que una instalación de este tipo supone una gran demanda energética.

En su larga trayectoria, esta compañía familiar no ha dejado de reinventarse para aprovechar las oportunidades del mercado. Actualmente cuenta con dos puntos de ventas, ambos situados en la provincia de Sevilla. Al sumarse ahora al autoconsumo industrial, deja claro que se trata de una empresa a la vanguardia.

En esta instalación se ha utilizado el espacio disponible en las cubiertas de las naves para la colocación de los módulos. Lo que supone aprovechar un espacio que no podía ser optimizado de mejor manera.

Análisis de un nuevo caso real de autoconsumo industrial

Tras un estudio personalizado de las necesidades energéticas de la instalación, se concluyó en destinar 408 metros cuadrados y aprovecharlos para producir electricidad. Mediante la instalación de 204 módulos. 

En este proyecto se instaló una potencia fotovoltaica de 67,3 kWp. Lo que supone una producción de energía anual de 122.298,91 kWh. Teniendo en cuenta la cantidad de electricidad que necesita una empresa de frío industrial como Mariscos González, esta producción de energía supone un gran ahorro en su factura eléctrica. Hablamos de una reducción superior al 30% en el gasto anual.

En el estudio realizado para esta instalación se tuvo muy en cuenta que se produjera el mínimo posible de excedentes. Recuerda que el beneficio de los excedentes es menor que el ahorro que supone utilizar la energía que producimos. Por lo que siempre es deseable que se aproveche el máximo posible de energía generada.

Como consecuencia del importante ahorro que produce esta instalación de autoconsumo industrial, el plazo de amortización de la instalación será solo de cinco años.

Como siempre, no nos olvidamos del impacto positivo que la instalación solar supone para el medioambiente. Que, junto al bolsillo, es el otro gran beneficiado de cada instalación de autoconsumo industrial.

Con una instalación fotovoltaica de este tamaño se evitan 53.526,07 kg de emisiones de CO2 a la atmósfera. Lo que equivale a 2220 árboles plantados. Además, se evita el consumo de una gran cantidad de petróleo, concretamente de 100,5 toneladas.

¿A qué esperas para unirte al autoconsumo industrial?

El análisis de esta instalación nos ha permitido una vez más poner de manifiesto los beneficios del autoconsumo. Y evidenciar cómo este te permite ahorrar en la factura eléctrica. La de hoy es una instalación de dimensiones importantes, pero tanto instalaciones más pequeñas como colectividades y unifamiliares pueden beneficiarse a la medida de sus necesidades. Ya que no es necesario disponer de mucho espacio para aprovechar la energía solar.

¿Quieres saber cuánto puedes ahorrar en tu caso?

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